Organizar versus ordenar: minimalismo

Parece haber un debate constante sobre organizarse frente a ordenar. ¿Cual es mas importante? ¿Debo organizar, ordenar o ambas cosas? Esta es mi experiencia organizando y ordenando.

Solía ​​pasar horas cada semana viendo videos de organización. Me sorprendería y me complacería ver a la gente organizar el contenido de su armario o gabinetes de almacenamiento en tinas de plástico transparentes y ordenadas, con tapas y etiquetas lindas. Ver estos videos me motivaría tanto para ir a buscar mis propias tinas de organización y mover todas mis pertenencias a contenedores claramente etiquetados, donde todo tiene su lugar.

La idea de organizar todas mis cosas parecía muy divertida, y comencé a usar mis cupones (también me gustaban los cupones) para comprar contenedores de organización y juegos de cajones para mis gabinetes. Organicé toda mi pasta de dientes a granel, desodorantes adicionales e incluso puse toda la ropa que casi no uso en una linda caja para guardar en el ático. Organice una caja de bufandas, una caja de zapatos de repuesto e incluso organicé todos mis libros de la universidad en una caja con una etiqueta para poner en el garaje.

Pronto me di cuenta del problema con mi juerga organizativa. Simplemente estaba organizando todas las cosas que no estaba usando. No necesitaba cincuenta tarrinas de pasta de dientes o treinta geles de ducha Bath and Body Works. No necesitaba esa caja de ropa que nunca usé, ni mis libros de la universidad.

Poco después de mi juerga organizativa, encontré el minimalismo. En este punto, cambié mi enfoque de organizar a ordenar. Me detuve con la locura de los cupones y dejé de comprar más cosas. Comencé a trabajar a través de las cosas que tenía y regalé algunas. Finalmente, los contenedores de almacenamiento y organización se volvieron inútiles. Ya no tenía cosas para llenarlas, así que las donaron junto con muchas de las cosas que contenían.

Esta experiencia me enseñó que la ordenación siempre debe venir antes que la organización. Durante la mayor parte de mi fase de organización, la organización fue simplemente ordenar las cosas que no estaba usando o con las que no necesitaba para empezar. Aunque organizar puede parecer productivo y verse bonito, ahora prefiero el aspecto minimalista de casas limpias y claras con solo lo esencial y nada más.

Vivir de esta manera me ha abierto la mente y el horario, de modo que tengo tiempo para hacer cosas que realmente me iluminan y me hacen sentir viva. Tengo tiempo para todos mis pasatiempos y objetivos. Y puedo decirles que organizar ya no es uno de esos pasatiempos.

Publicaciones Similares